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31 octubre 2020

EL VIOLIN DEL TITANIC

La última gilipollez que estoy leyendo en prensa y oyendo en radio en estos días es que ha aparecido el violín del director de la orquesta del Titanic. Os doy mi palabra. Uno ya no sabe si reír o llorar. Podéis buscarlo en google y ver las muchas noticias que hay sobre el tema. En el extranjero llevan ya bastantes meses dándole vueltas al tema y ahora empiezan en España. Wallace Henry Hartley, violinista profesional y director de la orquesta del Titanic se convirtió en una leyenda al morir en la noche del naufragio. Durante un periodo de tiempo no determinado, Hartley y sus siete músicos estuvieron tocando música en el área de acceso a primera clase, bajo la primera chimenea del barco. Tocaron sobre todo ragtime y otros temas populares de la época. Se sabe bastante menos de lo que se cree acerca de lo que hicieron los músicos aquella noche. Pero hay un hecho confirmado por muchos testigos. Tocaron música y os aseguro que hay que ser muy hombre y tener un alma muy grande para permanecer tocando música en la cubierta de un barco que se hunde. Por eso este tipo de noticias me parecen como mínimo de mal gusto. Y os voy a contar por qué estoy convencido de que tal noticia es falsa. Antes de nada una pequeña aclaración histórica sobre la orquesta del Titanic. En realidad los 8 músicos del Titanic estaban encuadrados en dos orquestinas diferentes: Una compuesta por tres músicos y que tocaba en el Café Parisien y en el Restaurant a la Carte y una segunda orquestina formada por cinco hombres y que amenizaba las veladas de los demás espacios de primera clase del barco. Hartley ejercía la jefatura de ambas orquestinas y decidía su composición. Hay que reseñar que los músicos no figuraban enrolados como tripulantes sino como pasajeros de 2ª clase. Así la White Star Line se ahorraba problemas laborales.


Tras el naufragio, el Atlántico Norte apareció sembrado de cadáveres entre los restos del barco. Tanto es así que la mayoría de los buques de pasaje desviaron su ruta para no tener que pasar por la zona en la que el Titanic se había hundido. Ningún capitán deseaba mostrar a sus pasajeros y tripulación el pavoroso escenario de un naufragio.


Debieron ser varias las consideraciones que llevaron a la White Star Line a fletar un buque que fuese a la búsqueda de los que habían perecido en la tragedia: la cantidad de pasajeros ilustres que habían muerto, el deseo de que el nombre de la empresa quedase en buen lugar tras el desprestigio que supuso el hundimiento, o tal vez, suavizar de algún modo las futuras reclamaciones que se pudieran plantear por parte de los familiares de los fallecidos.

Con este fin la White Star fletó los servicios de cuatro barcos mercantes cuyos nombres eran Mackay Bennet, Minia, Montmagny y Arlgerine. En total los cuatro buques fúnebres consiguieron recuperar 328 cadáveres de los 1517 tripulantes y pasajeros muertos en el Titanic. 150 fueron desembarcados en la ciudad de Halifax y 178 fueron sepultados en el mar. El cuerpo de Wallace Hartley fue recuperado del mar por el Mackay Bennet el 14 de mayo de 1912. Una vez embalsamado su cadáver fue desembarcado en Hálifax y embarcado en el vapor Arabic (también de la White Star Line) que lo transportó a su Inglaterra natal. Su entierro en Colne fue un todo un acontecimiento y miles de personas asistieron o contemplaron el paso del cortejo fúnebre de aquel hombre increíble que se convirtió en una leyenda tras su muerte.


Lo del violín no es nada nuevo. Ya en su día algunos periódicos sensacionalistas comentaron que el cuerpo de Hartley había sido encontrado abrazado a su violín o, según otros, con su violín entre el abrigo y el cuerpo. Sin embargo, el inventario de los efectos encontrados en el cuerpo de Hartley en los archivos oficiales de Halifax no dicen nada de nada del violín. Y esto es un hecho objetivo. Podéis consultar el inventario de todos los cuerpos recuperados en el siguiente enlace:

http://www.titanic-titanic.com/titanic_record_of_bodies_and_effects.shtml


La entrada en el archivo correspondiente a Hartley dice lo siguiente:

(reproducimos en inglés para que nadie piense que se puede manipular la traducción)


Body nº 224-MALE.
Estimated Age 25-Hair Brown; Clothing- Uniform (green facing); brown overcoat; black boots; green socks.
Effects- Gold fountain pen, “W.H.H”; diamond solitaire ring; silver cigarette case; letters; silver match box marked “To W.H.H. from Collingson´s staff. Leeds “Telegram To Hartley, bandmaster “Titanic”; nickel watch; gold chain; gold cigar holder; stud, scissors; 16 s; 16 cents; coins.
NAME- Wallace Hartley, Surreyside West Park St, Dewsbury


Si el violín no está aquí……………..es que no hay violín.
Segundo hecho contrastable: Ninguno de los tripulantes del Mackay Bennet mencionaron jamás el violín. Y estos señores (que hicieron un trabajo durísimo e ingrato de forma muy delicada) hablaron y escribieron. Y mucho. Hay varios testimonios escritos de los tripulantes excepcionales. En estos testimonios, aparte de la pena y el dolor que les invadía por la tragedia que estaban viviendo, describen el dinero, los diamantes y otros efectos encontrados en los bolsillos de los cuerpos de los millonarios que flotaban en el mar. ¿No iban a describir el hallazgo del violín de uno de los mayores héroes de aquella noche?
Hay otras consideraciones para dudar de esta noticia. Consideraciones de puro sentido común. ¿Un instrumento tan delicado como un violín iba a resistir una inmersión de 20 días en el mar? El hundimiento del Titanic forma parte de la cultura anglosajona, una parte importante. ¿Por qué entonces no se ha hablado nunca del violín? …………..En fin ……………otra titánica tontería.

 Fernando José García Echegoyen

naufragios.es@gmail.com

https://www.echegoyen.es